Sin lugar a duda, contar con un electrodoméstico como la batidora brinda muchos beneficios y practicidad en las preparaciones de tus comidas, especialmente si se trata de repostería. En estas temporada decembrina, la batidora puede ser tu gran aliada para elaborar las más deliciosas recetas en el menor tiempo posible y con poco esfuerzo.

Tipos de batidoras

A la hora de elegir la batidora que vas a comprar debes tomar en consideración que existen distintos tipos, los más comunes son: 

Batidora de mano

Te permite batir en cualquier recipiente mientras la sujetas en la mano y la vas moviendo. Consta de un cuerpo donde está el motor, mientras las cuchillas se encuentran al final de una varilla larga. 

Entre sus ventajas se encuentran:

• Ocupa menos espacio. Al no tener la base y el soporte su tamaño es menor. 
• Es fácil de limpiar, porque posee menos piezas.
• Puedes ir modulando su velocidad e intensidad. 

Sin embargo, algunas desventajas pueden ser: 

• Es más lenta que otro tipo de batidoras como la de pedestal. 
• Suele ser más ruidosa.
• Si su potencia no es suficiente, eso influirá en los resultados de tus preparaciones y que queden bien batidas o trituradas.

Batidora de pedestal

Este tipo de batidoras dispone de un soporte fijo donde se coloca el recipiente para batir y las varillas. Facilita mezclar, batir, amasar una importante cantidad de ingredientes y es muy recomendable para la repostería y elaboración de panes. 

Algunas de sus ventajas son: 

• Menor esfuerzo a la hora de batir, no necesitas usar tu mano, sino que todo lo hace automáticamente, al estar apoyada en su soporte.
• Cuentan con mayor potencia. Usualmente, traen distintas velocidades y esto ayuda cuando se trata de mezclas muy espesas. Se adaptan a tus necesidades y tipos de preparaciones.
• Suelen traer mayor variedad de accesorios.

No obstante, algunas desventajas pueden ser:

• Ocupan mayor espacio.
• Su precio es un poco más elevado.
• Al contener más piezas, puede que sea un poco más difícil de asear.

Cabe señalar que, también existen otros tipos de batidoras, tales como las minibatidoras y las de inmersión. La selección dependerá de tus requerimientos y usos que le vayas a dar.

Y como ya estamos en la época más hermosa del año: Navidad y antesala del 2024, te dejamos una receta muy tradicional en estas fechas.

Galletas de jengibre

Ingredientes:

Mantequilla sin sal troceada….140 g.

Azúcar moreno….50 g.

Melaza o miel de caña….75 g.

Huevo….1.

Jengibre molido….. 2 cucharaditas.

Canela molida…. 1 cucharadita.

Nuez moscada molida…. 1 buena pizca.

Bicarbonato sódico (o levadura química)…. 1 cucharadita.

Sal…. 1/4 cucharadita.

Harina de repostería….300 g.

Azúcar glasé…200 g.

Clara de huevo pequeña….1.

Preparación:

Se recomienda preparar la masa el día antes o por la mañana y así se facilita el proceso del reposo de la mezcla. Para la elaboración de la masa solo debes trocear la mantequilla y colocarla en el recipiente con el azúcar moreno y la melaza. Calentar a fuego suave hasta que se derrita. Remover con suavidad, añadir todas las especias y dejar enfriar unos 10 minutos. Luego, tamizar aparte la harina con el bicarbonato sódico y la sal. Formar la mezcla y añadir los ingredientes húmedos y el huevo. Batir un poco con la batidora y empezar a mezclar todo hasta tener una masa homogénea. Estará húmeda y pegajosa.

Después, colocar una base de plástico film en la superficie de trabajo y volcar la masa. Extender un poco para aplanarla y envolverla por completo con el plástico. Dejar enfriar en la nevera como mínimo dos horas.

Si las dejaste toda la noche puede que esté muy dura, así que puedes dejarla atemperar fuera mientras precalientas el horno a 180ºC. Preparar también un par de bandejas y sacar el rodillo.

Extender la masa -mejor si trabajamos con la mitad primero- usando un rodillo. Sobre papel enharinando, la mesa no debería pegarse. Dejar un grosor de unos 4-6 mm. Cuanto más finas, más crujientes. Recortar las galletas con los cortadores de las formas que deseemos y colocarlas en las bandejas, dejando cierto espacio entre ellas.

Por último, hornear durante unos 10-12 minutos, solo hasta que se empiecen a tostar por los borde, o justo antes; se endurecen al enfriar. Esperar un poco fuera del horno antes de trasladarlas a una rejilla para que se enfríen por completo.